Voladores de Cuetzalan, Puebla. Pueblo Mágico

Hablar de los voladores de Cuetzalan es hablar de historia, y aunque para ello podemos encontrar diversas páginas enfocadas exclusivamente a estos temas, en esta ocasión vamos a platicar un poco al respecto, claro, todo a raíz de estas fotografías en blanco y negro de los voladores de Cuetzalan que les comparto el día de hoy y que habían estado esperando su publicación desde hace ya varios meses atrás.
 

Primero que nada, es importante mencionar que, a partir del año 2009, la danza de los voladores de Cuetzalan se ha proclamado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO, y por supuesto que este hermoso pueblo mágico enclavado en la Sierra Norte de Puebla lo merecía el reconocimiento de esta índole desde hacía tiempo atrás.

Pero hablando específicamente de los voladores, se dice que se origen se remonta al menos a 600 a.C, esto nos indica que se ha practicado por lo menos 2,500 años.
Este acto es uno de los celebres juegos que se desarrollaban desde el México prehispánico, el cual estaba enfocado en la fertilidad, y del cual únicamente podían ser participes los hombres seleccionados y entrenados para estas fiestas ceremoniales el cual se realizaba únicamente cada 52 años, que representaba el ciclo prehispánico.

“Cuenta la leyenda que una fuerte sequía se apoderó de la región de Totonacapan (lo que hoy día corresponde aproximadamente a los estados de Puebla y Veracruz). Esto hizo que los sabios ancianos pidieran a un grupo de jóvenes que se internaran en el monte y cortaran el árbol más alto y recto que encontraran para elaborar una ceremonia -complementada con música y danza- en la que se rogara a los dioses por abundantes lluvias. Al ser realizadas desde el punto superior del tronco más alto, las oraciones serían más fácilmente escuchadas por los dioses. Parece ser que el ritual dio tan buen resultado tras su primera ejecución que comenzó a llevarse a cabo año tras año, tratando así de asegurar buenas cosechas”.

Sin más por contar por el momento, les dejo las fotografías en blanco y negro que tomé en un viaje de esparcimiento del hermoso Cuetzalan, espero que las disfruten y que me ayuden a compartir.
Saludos a todos.